El Ministerio Público lamentó la muerte en prisión del dirigente de Vente Venezuela, Jesús Martínez Medina, quien sirvió como testigo el pasado 28 de julio y poco después lo arrestaron y acusaron de participar en las protestas del 29 de julio.
«Esta persona, a pesar de encontrarse preventivamente privada de libertad, estaba hospitalizada en el Centro Médico Luis Razetti en el estado Anzoátegui desde el día 11 de octubre, por padecer Diabetes tipo 2», informó en un comunicado.
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Asimismo, aseguró que durante todo este tiempo contó con la debida atención médica. «Se le suministraron los medicamentos y demás tratamientos que su condición de salud ameritaba».
El Ministerio Público acotó que el Estado venezolano y otras instituciones «han procurado la garantía del debido proceso, la tutela judicial efectiva y el goce de los demás derechos constitucionales, tales como el de la salud, no solo para la persona a la que se hace referencia este comunicado, sino también para el resto de quienes aun se encuentran privados de libertad».
En este sentido, afirmó que garantizan los derechos, tanto de los privados de libertad en las protestas, así como de los presos comunes en el país.