El expresidente de EEUU y actual candidato republicano para volver a la Casa Blanca, Donald Trump, enfrenta una creciente deuda que supera los $750.000 con varias ciudades en las que realizó mítines de campaña desde al menos 2018.
De acuerdo con datos suministrados por medios locales, esta cantidad se debe principalmente a gastos por seguridad, control de tráfico y otras operaciones relacionadas con la protección durante sus eventos.
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A pesar de las repetidas solicitudes de pago, muchas de estas ciudades aún no han recibido el reembolso correspondiente, lo que ha generado una considerable controversia.
Entre las ciudades afectadas se encuentran Erie en Pennsylvania, donde Trump celebró un mitin el mes pasado, y otras localidades que han tenido que asumir los costos de seguridad y logística sin recibir compensación.
Estos gastos incluyen la movilización de fuerzas policiales, el cierre de calles y la implementación de medidas de seguridad adicionales para garantizar la protección de los asistentes y del propio Trump.
Erie, cuyas facturas fueron reportadas previamente por el medio local The Erie Times-News, no es la única ciudad que ha acogido mítines de Trump y se quedó sin recibir el pago de su campaña.
Cuatro ciudades, entre ellas Erie, y un condado han informado a NBC News que aún están a la espera de que la campaña de Trump salde sus deudas.
Estas facturas pendientes se refieren principalmente a los reembolsos por los costos incurridos por las agencias locales de seguridad y otros servicios de emergencia.
¿DE QUIÉN ES LA RESPONSABILIDAD?
La responsabilidad legal de cubrir los gastos no siempre es evidente.
Sin embargo, un representante de la campaña de Trump mencionó en un mensaje de texto a NBC News que «las consultas relacionadas con la aplicación de la ley local y los costos de respuesta rápida deben dirigirse al Servicio Secreto».
Sobre esto último, Anthony Guglielmi, portavoz del Servicio Secreto, afirmó al mismo medio que es la agencia, y no la campaña, la que generalmente solicita la asistencia local para estas actividades.
Pero se acotó, que el Servicio Secreto “carece de un mecanismo para reembolsar a los gobiernos locales por su apoyo durante los eventos de protección” de un político como Trump, añadió.
Guglielmi señaló que la agencia ha “identificado esto como una necesidad crítica” y está trabajando con el Congreso para hacerlo posible en el futuro.