Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) alertaron sobre un aumento de los casos de COVID-19 en California debido a las nuevas variantes del virus.
De acuerdo con medios locales, se ha emitido una alerta por un aumento de las concentraciones del virus en las aguas residuales, así como el alza en las pruebas positivas en todo el estado.
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Sin embargo, es demasiado pronto para saber si FLiRT —una de estas variantes del virus— marcará una diferencia significativa en el panorama de la COVID-19, puesto que hasta ahora los efectos han sido pequeños.
Pero los funcionarios de salud están atentos e instaron a los californianos, especialmente a aquellos en riesgo, a estar preparados.
¿DE DÓNDE PROVIENEN LAS CEPAS FLIRT?
No se sabe dónde surgieron las variantes FLiRT por primera vez. De lo que se tiene conocimiento, es que fueron detectadas inicialmente en las aguas residuales de Estados Unidos por los CDC.
Actualmente, se analizan estas muestras para detectar rastros de SARS-CoV-2 circulando en la comunidad, incluso si las personas no presentan síntomas.
Hasta ahora, estas variantes se han identificado en varios otros países, incluidos Canadá y el Reino Unido. FLiRT tienen dos mutaciones en sus proteínas de espiga. Es decir, las protuberancias en la superficie del virus que no se vieron en JN.1 (la cepa previamente dominante en Estados Unidos).
Lo preocupante, es que algunos expertos advirtieron que estas mutaciones podrían facilitar que el virus evada la inmunidad de las personas. Es decir, podría eludir la inmunidad por la vacuna o por una infección previa de COVID-19.
