Los más de un millón de venezolanos que viven en Perú están en “incertidumbre”, después de que Pedro Castillo intentara ejecutar un golpe de Estado y se desencadenara una nueva crisis política en el país sudamericano.
El periodista venezolano Ayatola Núñez vive en Perú desde hace cinco años, cuando gobernaba Pedro Pablo Kuczynski. Desde entonces, seis presidentes han pasado por el poder, algo que lo hace experimentar una sensación de “incertidumbre”.
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“Ante una eventualidad como esa, lo primero que hacemos los venezolanos es mirar el precio del dólar porque afecta las remesas que podemos mandar a Venezuela”, explicó a la Voz de América.
Núñez consideró que, en medio de la crisis, los venezolanos están de “últimos en la cola”, dado que se paralizaron las iniciativas para apoyarlos. Igualmente, entiende que ante este escenario, Perú no puede atender “los problemas de los demás”.
VENEZOLANOS HUELEN “OLOR A PÓLVORA”
Ángel Mendoza, otro migrante venezolano, esperó que la cotidianidad quedaría en suspenso por el golpe de Estado. Por tanto, hizo algunas compras de emergencia, pero la mayor parte de los ciudadanos siguieron con sus actividades regulares.
“Asocio la parte de golpe de Estado con olor a pólvora, compras nerviosas y con encerrarse en la casa. Salí a comprar cosas porque me sonaba a crisis larga, pero no fue así. Había tráfico, transporte público, trabajo”, explicó.
Núñez apuntó que, al igual que los demás, los venezolanos deben continuar sus actividades. “Es un poco frustrante porque puede estar ocurriendo un golpe de Estado y la vida sigue. Hay que seguir trabajando, eso es lo que tenemos que hacer”, indicó.
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Para Gustav Brauckmeyer, politólogo especialista en procesos de desarrollo económico en América Latina, expuso que la inestabilidad política en Perú puede provocar dificultades para fomentar políticas a favor de los venezolanos.
Esto ha generado que algunos venezolanos, al igual que Núñez, se planteen la posibilidad de migrar hacia otros países. Según el migrante, la crisis política peruana pareciera “nunca acabar”, algo que puede afectar su estabilidad económica.
