Estuvo secuestrada por un pervertido, golpeó la puerta hasta sangrar y logró escaparse

Carlos Ramiro Chacín
Por Carlos Ramiro Chacín 3 Min de Lectura
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Una mujer estuvo secuestrada por un pervertido en una casa en el sur de Oregón, en Estados Unidos. Consiguió escapar de la celda de hormigón al romper a puñetazos la puerta y alertó a las autoridades sobre este depredador.

Stephanie Shark, agente especial del FBI encargada del caso, precisó que el pervertido secuestró a la mujer y la encadenó. También fue “agredida sexualmente y encerrada en una celda de bloques de hormigón”.

“La policía dice que golpeó la puerta con las manos hasta que sangraron para poder liberarse. Su pensamiento rápido y su voluntad de sobrevivir pueden haber salvado a otras mujeres de una pesadilla similar”, expuso Shark.

 

La mujer consiguió escapar de la casa ubicada en Klamath Falls, de unos 22.000 habitantes. “Tenía varias laceraciones a lo largo de los nudillos”, expuso el capitán de policía de Klamath Falls, Rob Reynolds.

¿CÓMO LA SECUESTRÓ?

La denuncia penal precisó que el sospechoso, identificado como Negasi Zuberi, pidió a una prostituta el 15 de julio en Seattle. Una vez llegó la víctima, el secuestrador le dijo que era un policía encubierto, le mostró una placa, le apuntó con una pistola y la esposó.

Zuberi le puso unos grilletes a la mujer y la puso en la parte trasera de su carro. Después la llevó hasta su casa, pero primero se detuvo en el camino para abusarla sexualmente.

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Negasi Zuberi es sospechoso de otras agresiones sexuales en cuatro estados. Foto: cortesía

El secuestrador metió a la mujer en una celda improvisada construida con bloques de cemento con una puerta de barrotes de metal. “Durmió brevemente y al despertar se dio cuenta de que probablemente moriría si no intentaba escapar”, dice la denuncia.

Negasi Zuberi escapó de Klamath Falls poco después, pero fue detenido al otro día en la ciudad de Reno, Nevada. Ahora enfrenta una condena de cadena perpetua por secuestro interestatal y transporte de una persona para participar en una actividad sexual delictiva.

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