Dos migrantes venezolanos, los cuales ingresaron irregularmente a Estados Unidos, fueron detenidos por golpear a un funcionario de la Patrulla Fronteriza en El Paso, ciudad del estado de Texas, según las autoridades.
Los dos detenidos fueron identificados como Luiscar Godoy Hernandez, de 20 años, y Gregory Morillo Quinto, de 26. Además, las autoridades aclararon que el incidente ocurrió el lunes, 13 de marzo.
El Buró Federal de Investigación (FBI, por sus siglas en inglés) precisó que la Patrulla Fronteriza recibió un reporte sobre cuatro personas que habrían ingresado ilegalmente a Estados Unidos, de acuerdo a El Paso Times.
Por tanto, un vehículo del organismo se dirigió hasta la zona para iniciar las investigaciones. El agente se encontró con cuatro personas y las interrogó en español y los migrantes precisaron que eran de Venezuela.
NO TENÍAN DOCUMENTOS
Las cuatro personas abordadas no contaban con evidencias de su residencia en Estados Unidos o alguna documentación que los autorizara a estar en el país. Por tanto, detuvieron a los venezolanos y los ubicaron en la parte trasera del vehículo.
Posteriormente, se cruzó con Luiscar Godoy y otra persona, quienes también fueron detenidos. No obstante, los migrantes comenzaron a “balancearse de un lado a otro como si estuvieran intentando escapar del vehículo«.
El funcionario roció a los detenidos con gas pimienta, pero Godoy lo pateó en el pecho y lo golpeó en el rostro. La agresión dejó aturdido al agente y la mayor parte de los migrantes venezolanos lograron escapar.
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El agente comenzó a buscar nuevamente a los migrantes y consiguió detener a Luiscar Godoy. Asimismo. capturó a Gregory Morillo, quien le dio un golpe en la oreja al funcionario.
Ambos venezolanos fueron recluidos en la cárcel del condado de El Paso sin fianza. Gregory Morillo aceptó las acusaciones y explicó que golpeó al funcionario por “miedo a que lo arrestaran”.
El gobierno de Joe Biden prohibió el ingreso irregular de migrantes venezolanos y estipuló un programa especial para que puedan mudarse a Estados Unidos. Aquellas que resulten detenidos, tendrán que volver a México.
