La peleadora de origen venezolano, Julianna «The Venezuelan Vixen» Peña hizo historia al ganar su segundo Campeonato del mundo durante el UFC 307 al derrotar a Raquel Pennington.
Durante los primeros minutos de combate, Pennington le propinó golpes potentes a la criolla y la logró derribar en un par de ocasiones. No obstante, Peña se valió de sus derribos para contrarrestar la pegada de su rival y logró dominarla desde el suelo, buscando la sumisión en varias ocasiones, aunque sin poder finalizarla.
Ambas peleadoras tuvieron un combate vibrante en la que ninguna pudo finalizar a la otra y dejaron todo en mano de los jueces. Tras una cerrada decisión dividida (48-47, 47-48, 48-47) la peleadora nacida en Washington, pero de madre venezolana, se terminó coronando como la nueva monarca de peso gallo de la UFC.
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Tras anunciarse la decisión, el propio presidente de la UFC, Dana White, subió a colocarle el cinturón de campeona a Peña. Durante la entrevista tras la pelea, dijo que quisiera defender su título ante la retadora número uno del ranking, Kayla Harrison, quien peleó y ganó pocos minutos antes.
No obstante, admitió que antes de ese combate le gustaría enfrentar una vez más a la mejor peleadora en la historia del deporte, Amanda Nunes, a la cual ya venció en una ocasión para ganar su primer título, pero con la que también perdió en la pelea de revancha, dejando el récord personal ante la leyenda brasileña en 1-1.
Amanda Nuñez se encuentra actualmente «retirada» de UFC, pero la brasileña dijo que volvería «si tiene que volver a cerrar alguna boca». Hasta el momento no se ha pronunciado sobre el reto de la venezolana para cerrar la trilogía de combates.
