El trágico incidente ocurrido en Wilton Manors (EEUU) dejó a una familia salvadoreña devastada y comunidad en estado de shock. Christopher Granados, un adolescente de 16 años, perdió la vida tras recibir un disparo mientras jugaba con un arma de fuego junto a otro joven en una residencia multifamiliar.
La madre de Christopher, Edith Medina, expresó su dolor y desconcierto ante la pérdida de su hijo mayor. Describió la situación como un sueño del que no pueden despertar.
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«Su hermana y toda la familia no lo pueden creer, piensan que es un sueño y que vamos a despertar», le dijo a un grupo de periodistas.
La policía de Broward informó, que el tiroteo, se produjo el lunes por la tarde en una vivienda ubicada en la cuadra 400 de la calle 25 noroeste
Los agentes acudieron al lugar tras recibir una llamada de emergencia y encontraron a Christopher gravemente herido. Fue trasladado de inmediato a un hospital local, donde lamentablemente falleció poco después.
El joven de 16 años que estaba con Christopher en el momento del incidente fue arrestado y enfrenta un cargo de homicidio involuntario con un arma de fuego.
La Oficina del Sheriff de Broward está llevando a cabo una investigación exhaustiva para esclarecer las circunstancias exactas del tiroteo. Según los testimonios de otros adolescentes presentes en la residencia, ambos jóvenes estaban manipulando las armas cuando una de ellas se disparó accidentalmente.
HABÍAN «AMENAZADO» A SU HIJO
Christopher era el hijo mayor de tres hermanos y asistía a la secundaria Fort Lauderdale High. La madre mencionó que no conocían al joven involucrado en el incidente y que recientemente había recibido una amenaza contra su hijo en la escuela, lo que añade una capa de preocupación y tristeza a la tragedia.
Los vecinos de la zona describieron escenas de pánico y confusión tras el tiroteo, con varios adolescentes corriendo fuera de la casa, gritando y llorando. De momento, las averiguaciones continúan.
